Aunque tengas la sensación de que tu perro llegó a casa «antes de ayer», los años también pasan por él. Cuando un animal se está convirtiendo en anciano, o ya es mayor, las funciones corporales se ralentizan, se deterioran los músculos y los huesos, comienzan a aparecer los problemas de salud y el comportamiento se modifica.
Por todo esto, si tu perro es anciano necesita cuidados específicos relacionados con su edad. Son fáciles de implementar pero muy eficaces para aumentar el bienestar del perro anciano.
Esencialmente consideramos que tenemos que poner más foco en la alimentación, el ejercicio, la estimulación a partir de actividades para aumentar capacidades sensoriales como el olfato, la vista o el oído y el descanso.
A partir de qué edad se considera un perro anciano
Hay algo muy básico que nunca le puede faltar a tu perro, que es mucho cariño y abundante amor. Estos son los dos ingredientes esenciales para que un perro sea feliz.
Sin embargo, factores como la raza, el tamaño y el peso son importantes para determinar la supervivencia de tu perro. Aumentar los cuidados durante la edad anciana es un plus que ayuda a alargar su vida.
Se sabe que los perros de raza grande, es decir, con una talla y un peso elevado, son más propensos a vivir menos años que los mestizos pequeños. Por esto, no todos los perros envejecen a la misma edad ya que dependerá de su raza y tamaño.
Entonces, los perros de pura raza son menos longevos que los perros de un tamaño pequeño. Y, además, lo mismo ocurre con los mestizos, que viven más años, de manera general.
Por ejemplo, un Yorkshire o un chihuahua lo vamos a considerar un perro anciano a partir de los ocho años, un perro de raza mediana como un Border Collie se considera anciano a los siete y un San Bernardo a los seis años.
Cuando tu perro ha entrado en la edad anciana su comportamiento también comienza a modificarse y podrás verlo más cansado, durmiendo durante más tiempo, cogiendo peso con facilidad, intentando moverse menos, e incluso con problemas de oído u olfato.
Aun así, puedes mejorar su calidad de vida y retrasar el envejecimiento teniendo en cuenta estos cinco cuidados esenciales:
Alimentación adaptada y supervisada
Los perros ancianos tienden a aumentar de peso más rápido porque su metabolismo se enlentece. Esta es la razón por la que en su alimentación debemos de añadir un nivel más bajo de calorías y grasas evitando que tu compañero aumente su peso y se considere un perro con sobrepeso.
Sin embargo, esta estrategia alimentaria tiene que estar supervisada por un veterinario porque si perdiese demasiado peso podría ser peligroso o, quizá, este hecho pueda estar enmascarando una enfermedad oculta.
Otro de los factores a tener en cuenta en la alimentación de tu perro es proporcionar una dieta rica en antioxidantes para ralentizar el envejecimiento celular.
Hay un grupo de sustancias químicas presentes en ciertos alimentos, como los polifenoles, que son grandes aliados para ayudar a mantener una buena salud en tu perro porque actúan como antioxidantes, muy eficaces, que se pueden encontrar en frutas y verduras.
Además, es imprescindible aportar una dieta alta en vitaminas y minerales sin excedernos en fósforo.
Un punto clave y muy importante es ayudar a mantener el tejido muscular. Esto se consigue gracias a una alimentación que le aporte a tu perro proteínas de alta calidad y de fácil digestión.
No obstante, cuando un animal se nutre con una alimentación premium también está contribuyendo a mejorar la salud bucal porque la digestión comienza en la boca y es importante tenerlo en cuenta.
Para mantener unos dientes sanos se deben hacer las limpiezas dentales adecuadas sin olvidar una alimentación de calidad que le proporcione un tamaño de croqueta óptimo y relacionado con el tamaño del perro para que así la masticación le ayude a limpiar sus dientes.
Ejercicio moderado
Como con la edad los perros van reduciendo el movimiento y tienen menos actividad física es recomendable fomentársela. Hacer ejercicio diario es esencial para ayudar a mantener la masa muscular, mejorar la circulación sanguínea, su salud en general y así que estén más tiempo con nosotros.
Aunque el ejercicio lo marcará tu perro, lo ideal y más habitual es dar dos o tres paseos cortos al día, en las horas más frescas y durante 20 o 30 minutos para que no se canse demasiado.
Esto es mucho mejor que proporcionarle a tu perro solo un paseo largo al día. Por otro lado, nunca excedas este tiempo porque podría ser contraproducente para tu compañero.
Estimulación sensorial
Al igual que los humanos, con la edad, los perros también comienzan a perder los sentidos. Esto significa que se ven afectados el oído, la vista y el olfato.
En algunos casos también padecen enfermedades como la demencia senil, patología que se puede retrasar su aparición o hacer que no avance rápidamente practicando la estimulación sensorial.
Puedes hacer estas dos rutinas para estimular a tu perro anciano sensorialmente y que no pierda ciertas capacidades cognitivas:
- Juega con él utilizando juguetes interactivos como los que existen con un premio en su interior, diviértete tirándole un palo y que vaya a buscarlo u otro objeto o escóndele el juguete para que lo encuentre.
- Mantén una rutina diaria, y conserva la misma hora de paseos, comidas y descanso.
Más descanso de lo habitual
Los perros mayores suelen necesitar dormir más. Esto es totalmente normal.
Por eso, es ideal que le proporciones un área de descanso confortable, tranquila y alejada de ruidos u otras molestias para que él la asocie con su refugio de paz.
Sin embargo, no olvides que con la edad los perros comienzan a tener problemas musculares u óseas, y para ellos es más complicado subirse a, por ejemplo, el sofá. Esta es una de las razones por las que su cama no debería estar en un lugar elevado, aunque siempre debes tener en cuenta sus prioridades.
Prestar especial atención dentro de casa
Por lo general, los perros ancianos cambian su comportamiento en la casa. Ya no quieren estar solos y tienen miedo cuando esto ocurre porque sus sentidos están también debilitados y puede que se sientan más indefensos.
Una posible solución es compartir más tiempo con ellos y llamarlos cada vez que te muevas de estancia dentro de la casa para que se sientan seguros. Por otro lado, es importante mantener los muebles u otros objetos en el mismo lugar de siempre ya que los animales con problemas de visión, como la ceguera, se podrían desorientar.
Tener un perro anciano no es ningún problema si conoces sus necesidades y respetas su nueva manera de vivir. Con unas rutinas tan sencillas como estas puedes aumentar mucho la calidad de vida de tu perro viejito para ayudarlo a transitar esta etapa de la mejor forma posible.