El árbol de Navidad, las luces, los regalos, las guirlandas, el belén... Con la llegada de las fiestas nuestros hogares se transforman en pequeños templos navideños con multitud de elementos decorativos (los cuales pueden ser de muchos tipos). De hecho, hay algunos de ellos con los que, si convivimos con animales, deberíamos tener cuidado.
¿Sabías que algunas plantas son tóxicas para nuestros animales de compañía? ¿O que los petardos pueden acabar en un accidente grave? En España cada vez son más las familias que conviven con un animal, por tanto, debemos ser responsables e informarnos sobre los peligros a los que se exponen nuestros peludos en estas fechas y así, ponerle remedio siempre que se pueda.
Reuniones familiares
Por ejemplo, es muy común que durante las celebraciones de Nochebuena, Navidad y Nochevieja nos juntemos con la familia y los amigos, lo que para nuestros animales de compañía también supone que su casa, se vuelve un lugar con jaleo, ruidos y, posiblemente, multitud de gente desconocida (o prácticamente desconocida), algo que puede resultar estresante.
Como es muy probable que nuestros compañeros de cuatro patas (especialmente los gatos) no quieran estar en medio de tal barullo, es importante que siempre dispongan de una habitación donde puedan retirarse y estar tranquilos si así lo desean.
Además, durante estas reuniones es muy importante controlar las comidas, ya que las mesas llenas de comida son una auténtica tentación para cualquier perro o gato. Debemos estar pendientes de que no se acerquen a probar algo y, sobre todo, no dejar a su alcance productos como turrones o polvorones, ya que pueden ser tóxicos para ellos.
También relacionado con la comida, debemos evitar que reciban algún extra por parte de los invitados, especialmente porque las cenas navideñas suelen componerse de alimentos con un exceso de grasa además de los nocivos que ya hemos comentado.
Plantas típicas navideñas
En muchos hogares es tradicional que por estas fiestas compremos y decoremos la casa con plantas típicas de Navidad, como la flor de Pascua. A pesar de ser una planta preciosa, debemos tener mucho cuidado con nuestros perros y gatos, ya que es muy tóxica.
El contacto directo con su savia puede producirles dermatitis, picores y edemas, entre otros; y si a nuestro peludo le da por mordisquearla podemos enfrentarnos a un caso serio de diarrea, dolores abdominales y algún cuadro más grave.
Lo mismo ocurre con otras plantas típicas de la Navidad, como el acebo y el muérdago, que también tienen peligros ya no solo para nuestros gatos y perros, también para otros animales de compañía como los loros o hurones.
Una buena alternativa si queremos decorar nuestra casa con estas plantas es optar por las que son artificiales que, no solo son seguras para nuestros peludos si no que además podremos reutilizarlas año tras año.
Los petardos
Por último, durante estas fechas debemos tener mucho cuidado con los ruidos fuertes, como por ejemplo los procedentes de los petardos o de los fuegos artificiales. Muchos perros se asustan frente a ellos y, aunque en la mayoría de los casos se quedan paralizados, temblando, puede ocurrir que salgan corriendo y se escapen tras el ruido.
Por ello es importante reforzar la seguridad durante los paseos, acudiendo a lugares más apartados para soltarlos y, de no ser posible, dejarlos con la correa siempre puesta.
Además, también podemos acudir a un educador canino o especialista del comportamiento que nos ayude a trabajar el miedo a los ruidos fuertes con nuestro peludo y así evitar estos malos ratos.
