El gato esfinge (o sphynx) es una raza de gato originaria de Canadá. Se tiene constancia de gatos sin pelo en el periodo azteca, pero los primeros ejemplares modernos nacieron en Canadá gracias a una gata llamada Elisabeth, quien tuvo varias camadas entre 1966 y 1971, cuando se reconoció la raza por primera vez.
Su sobrenombre, gato egipcio —debido a su aspecto: delgado, estilizado, sin pelo— es su característica más destacada, debido a un gen recesivo (igual que el devon rex). Hoy día, el gato esfinge no es el único felino sin pelo, sino que comparte este atributo con el peterbald ruso.
Cómo es el gato egipcio
El gato egipcio o esfinge destaca por la casi total ausencia de pelo, si bien cuentan con una finísima capa de pelo, o pelusa (que recuerda a la piel de melocotón), sobre la piel.
Entre sus rasgos principales, podemos observar una cabeza en forma de cuña y los pómulos marcados, que se asemejan a los gatos del Antiguo Egipto. Los cuerpos son musculosos y compactos para su tamaño y peso, que suele oscilar entre los 3 y los 5,5 kg de peso.
En los ejemplares de sphynx o gato esfinge, encontramos ojos estilizados y orejas muy grandes y triangulares, piel arrugada y patrón de colores variado, que se mueve entre colores sólidos a atigrados o carey.
Comportamiento del gato egipcio
Los esfinge son sociables, calmados, curiosos y muy activos. Son gatos que disfrutan llamando la atención, y realizan muchas vocalizaciones. Son leales, adoran el contacto y se llevan bien con niños y otros animales.
A diferencia de otras razas, son muy apegados a la familia, lo que les vuelve más dependientes que otros felinos, y suelen realizar numerosas señales afiliativas, como lamidos, ronroneos, así como restregarse.
En época de celo, son muy susceptibles a cambios de comportamiento, tanto a nivel de conducta como marcaje, por lo que es una raza que se beneficia bastante de la esterilización para controlar los cambios hormonales.
Cuidados del gato esfinge
Debido a la falta de pelo, el esfinge o sphynx es un gato más sensible a los cambios térmicos, pues les resulta difícil aislarse del frío y del calor. Por esta razón, no suele recomendarse que estos animales tengan acceso al exterior (¡si lo tienen, infórmate sobre cremas solares!), así como puede ser necesario protegerles en climas más extremos.
Algunas recomendaciones que suelen darse son:
- Contar con iglús aislantes o hamacas para radiador
- Vivir en interiores y minimizar o evitar el acceso al exterior
- Contar con tiempo suficiente para una correcta socialización, juego y estimulación mental y social
- Incorpora saltos, rascadores y espacios para ejercitarse y descansar, igual que harías con cualquier otra raza activa
De igual modo, vale la pena tener presente que, si bien no tiene predisposiciones a problemas de salud graves, sí se ha detectado mayor prevalencia de cardiomiopatía hipertrófica y miopatía hereditaria. Si estás valorando criadores, deberías buscar líneas que estén libres de esta predisposición genética.
También tienen más problemas de piel que otros felinos, sobre todo urticaria pigmentosa y problemas en los dientes (enfermedades periodontales).
Claves para su adopción
Puede resultar difícil encontrar gatitos esfinge en adopción, puesto que es una raza relativamente poco conocida, además de contar con pocos criadores, si la comparamos con otras líneas. Ten presente que, si adoptas a un esfinge, deberás tener presente las precauciones de salud arriba mencionadas.
Si optas por criadores, recuerda confiar solo en personal cualificado y con garantías, puesto que nunca deberíamos potenciar las líneas de gatos esfinge o egipcios con problemas de salud. Asimismo, recuerda que hay muchísimos otros felinos que puedes adoptar y que necesitan de una familia.
¿Qué obligaciones tenemos por ley?
Como quizá sabes, a partir de la aprobación de la nueva Ley de Bienestar Animal, los gatos de protectora y criador deberán ser esterilizados si no estamos pensando en realizar una cría responsable. Como ya hemos visto, esto será interesante en el caso de los gatos egipcios, que incrementan mucho algunas conductas naturales durante sus celos (maullidos, vocalizaciones, etc.).
Si no te imaginas tu vida con otro gato que no sea un egipcio, recuerda que es un felino con cuidados específicos, sociable, cariñoso, pero también más sensible físicamente que otras razas.