El gato siamés, un felino exótico, maullador y activo que necesita estimulación mental diaria

El gato siamés, un felino exótico, maullador y activo que necesita estimulación mental diaria
Sin comentarios

El gato siamés tiene su origen en el antiguo reino de Siam, como fue conocida Tailandia hasta 1939. Se cree que eran gatos de la realeza tailandesa y que no fueron exportados hasta finales del siglo XIX hacia Inglaterra y Estados Unidos.

El siamés que tenemos presente en Europa y EEUU, no es aquel tradicional o ancestral, que comparte los ojos azules y estilizados, así como el estampado (pointed) típico de la raza, sino el siamés moderno, más esbelto, de rasgos afilados y cola fina.

Cómo es el gato siamés

El siamés moderno es un gato estilizado, esbelto, de estatura media, flexible y musculoso. Las hembras no suelen superar los 3 kg, mientras que los machos oscilan entre los 3,5 y los 5,5 kg y una altura de cruz que varía entre los 20 y los 25 cm.

Entre sus características más destacables tenemos la forma curvada de la cabeza en los laterales, sus ojos de un color azul intenso y más estilizados que otras razas y sus orejas de gran tamaño. Si bien los ejemplares pueden presentar diferentes patrones de color, los más comunes son el gris claro y oscuro, el marrón claro y oscuro y, en menor medida, naranjas y el tabby point (atigrado).

El siamés Thai, en cambio, muestra una menor selección genética, viéndose menos estilizados (son gatos de formas más redondeadas y similares a un gato europeo, por ejemplo) y manteniendo el patrón de color habitual. Se cree que su antecesor directo es el Si-Sawat o Korat, un gato plateado de ojos verdes.

Comportamiento del siamés

Se trata de gatos extrovertidos, inteligentes, activos y curiosos que están, principalmente, adaptado a climas templados. Al gato siamés le encanta moverse y tiene unas altas capacidades físicas y mentales, por lo que es un animal ideal para estimular mentalmente (por ejemplo, mediante el trabajo por refuerzo positivo y el uso del clicker). Además, aunque se trata de gatos bastante tercos, les encantan las caricias y la atención, por lo que, bien motivados, serán los alumnos perfectos.

Gato Siames

Para el siamés, suelen recomendarse viviendas con jardín y tiene la fama de estar considerado un gato de exterior, debido a que se trata de un animal muy activo y que busca entretenimiento de forma constante. Si no puedes ofrecer salidas controladas, lo ideal será que incluyas juguetes de enriquecimiento e inteligencia en su rutina, así como rascadores, ¡e incluso que le acostumbres a salir con correa y arnés a la calle! Muchos gatos siameses se habitúan con relativa facilidad a esta práctica frente a otros congéneres felinos a los que les puede costar más.

Es importante tener presente que son gatos muy maulladores —sí, la fama de chismosos es real, mentalízate si quieres compartir tu rutina con un siamés— y, en cambio, vale la pena que conviva con otros gatos. Es cierto que son animales que tienen una alta demanda de atención hacia sus cuidadores, pero también es una raza de grandes camadas, por lo que mostrará un comportamiento social muy marcado con otros individuos de su especie.

Cuidados del gato siamés

El cepillado del siamés puede ser ocasional. Como raza, el siamés pasará mucho más tiempo acicalándose que otros felinos. En invierno, busca el modo de que tu gato no pase frío ni deba estar en entornos húmedos (son bastante frioleros) y ayúdate de mantas, casitas iglú o hamacas para radiador, por ejemplo.

De igual modo, aunque puedan ser un poco escandalosos y nunca se recomienda gritar o educar mediante castigos, con el siamés esto es todavía una opción peor: son animales muy sensibles a los que podemos generar mucho estrés y ansiedad.

Debido a la selección genética, no es extraño encontrar siameses con estrabismo, sordera y otitis; también son habituales los problemas respiratorios y circulatorios y las enfermedades del corazón.

Un control veterinario adecuado te ayudará a mantener a tu gato en un buen estado de salud. Como parte positiva, pese a ser un gato de raza, su esperanza de vida es de 15 a 20 años: ¡impresionante!

Claves para su adopción

Si te planteas adoptar a un siamés, te animamos a valorar con calma todas las cualidades y las exigencias concretas de la raza. Como es habitual, por desgracia, hoy día encontrarás gatos siameses y mestizos de siamés en refugios y protectoras, por desgracia.

Si adoptas a un gato, recuerda que es importante que nunca lo hagas antes de los tres meses de edad (tiempo que debería poder pasar con la madre y la camada). Por otro lado, la adquisición a un criador deberá tener presente que esté libre de enfermedades hereditarias, si bien te animamos a visitar protectoras con calma, pues por desgracia es habitual encontrar gatitos de una enorme variedad de razas.

¿Qué obligaciones tenemos por ley?

Como quizá sabes, a partir de la aprobación de la nueva Ley de Bienestar Animal, los gatos de protectora y criador deberán ser esterilizados si no estamos pensando en realizar una cría responsable. Esto es notablemente positivo en el caso del siamés: las hembras tienen celos muy escandalosos (maúllan muy fuerte) y los machos suelen presentar una notable conducta de deambulación o vagabundeo en épocas de celo.

Si te decides a integrar a un gato siamés en la familia, recuerda que tras ese gato estilizado y de mirada penetrante, hay un parlanchín con muchas ganas de aprender y de vivir aventuras, por lo que te va a tocar convertirte en su acompañante perfecto.

Temas
Comentarios cerrados
Inicio