La Ley de Bienestar Animal se aprobó el 16 de marzo en el Congreso de los Diputados. Entre polémicas, como la enmienda de los perros de caza o el mantenimiento de la ley PPP de las que ya hemos hablado en Coco y Maya, su publicación en el BOE a finales de este mes (29 de marzo) da por cerrada una etapa.
A partir de ahora, las familias tenemos 6 meses (hasta el 29 de septiembre) para adaptarnos a las nuevas responsabilidades, así como informarnos adecuadamente, y nosotros vamos a explicarte las obligaciones ya aprobadas, aquellas sobre las que todavía no tenemos fecha definitiva y, por último, las dudas razonables que el Gobierno no ha resuelto aún.
Será obligatorio contratar un seguro
Desde ya mismo, puedes empezar a revisar seguros de responsabilidad civil para tu perro. A partir del 29 de septiembre de 2023, será necesario contar con un seguro RC que cubra daños a objetos y personas que pueda provocar tu perro. Si bien tienes seis meses hasta que sea obligatorio, puede ser una gran idea aprovechar los descuentos que están haciendo distintas compañías aseguradoras en la campaña promocional.
Dependiendo de la edad de tu perro, quizá te compensa ampliarlo con un seguro de accidentes o de salud, pero no te agobies ante grandes gastos: el seguro básico (RC) tiene un coste medio de 20 a 50 euros anuales.
¿Y la esterilización?, en el 99 % de los casos
De igual modo, la esterilización en gatos pasa a ser obligatoria a partir de los 6 meses de edad, como habíamos explicado hace unas semanas, mientras que los perros tendrán que ser controlados: si conviven machos y hembras, por lo menos, deberemos esterilizar a parte del grupo (a uno de los sexos), mientras que si no podemos asegurarnos de que no monte o sea montada, también deberemos esterilizar.
En cualquier caso, tengamos presente que la adopción de perros y gatos de los centros de protección ya obligaba a la esterilización, por lo que los cambios reales son mínimos aquí. Asimismo, muchos criadores no venden perros y gatos a las familias sin un compromiso de esterilización tampoco.
Hay una única excepción: si estamos inscritos e identificamos a los animales en el Registro de Criadores, podremos no esterilizarlos, en el caso de que queramos criar en casa. De este modo, se pretenden reducir abandonos y favorecer las adopciones durante los próximos años: algo necesario tras la aprobación nacional de la ley de sacrificio cero.
Para los trámites del Registro de Criadores tendrás que consultar los procesos vigentes en tu comunidad autónoma. Si no eres un profesional de la cría y solo quieres tener un par de cachorros, por ejemplo, puedes declarar a tu peludo como animal reproductor en el Registro de Identificación de Animales de Compañía (RIAC) y te darán el alta en el de criadores automáticamente. El RIAC es el registro "normal" que incluye a todos los animales que están correctamente identificados y en el que probablemente ya figure el tuyo. Lo más fácil para esta gestión es que consultes directamente con tu veterinario.
No hay fecha para el curso (aún)
Por otro lado, no tenemos fecha exacta para el curso de tenencia responsable. Lo que sabemos: tendrán que hacerlo todas las familias con perro, será básico, gratuito y, principalmente, informativo. Además, su validez será indefinida, para toda la vida, por lo que solo tendremos que hacerlo una vez.
En cambio, otras obligaciones y prohibiciones que se han publicado en el BOE, pero que no cuentan con fecha exacta, pasarán a ser de obligado cumplimiento en el mismo plazo que se plantea para toda la ley.
Así, debemos acostumbrarnos a evitar dejar a los perros encerrados en un coche o esperando, solos, a las puertas del supermercado, si lo hacíamos, y será obligatorio integrar, siempre que sea posible, a los animales en el núcleo familiar, así como establecer formas positivas para su educación, pues los instrumentos de castigo y dolor quedan prohibidos.
La cara B de todo esto se da con los animales de trabajo, ganadería y caza, que quedan exentos de estas normativas y tendrán su propia legislación, algo que ha sido muy criticado desde la enmienda promulgada por el PSOE.
Los perros PPP seguirán siendo PPP
A su vez, se mantiene la ley PPP al no haber podido aprobar el test de sociabilidad. En el Congreso, la mayoría de los partidos políticos se negaron a duplicar competencias y, a mediados de mes, afirmaron que se modificaría la ley de perros potencialmente peligrosos en un futuro próximo.
De este modo, todas las obligaciones de las familias con perros PPP siguen activas y no hay fecha conocida para los cambios. Una noticia que nos entristece, ya que no consideramos que estas razas sean más peligrosas que un mastín o un pastor alemán.
En cualquier caso, las razas que la ley española ha considerado PPP durante los últimos 25 años, como los pitbull, amstaff, rottweiler o dogos argentinos, entre otros, siguen siéndolo.
Listado positivo, sin fecha definitiva
Por último, la publicación del listado positivo no tiene fecha exacta. Sí contamos con una lista provisional, pero el reglamento específico se redactará durante los próximos meses. Se espera que el texto prohíba la tenencia de especies invasoras y algunos animales exóticos: dicho de otro modo, "seleccione" aquellas especies que sí podemos tener como animales de compañía.
No obstante, el Gobierno quiere identificar y legalizar a todos los animales que ya están siendo cuidados de forma responsable y, en ningún caso, se planteará su sacrificio. Como ocurrió con los cerdos vietnamitas, las tortugas de Florida o las cotorras argentinas recientemente, sí se pedirá a los ciudadanos que identifiquen, controlen y eviten su reproducción.
En resumen, con la publicación de la ley en el BOE, la fecha límite para casi todas las nuevas obligaciones está clara: 29 de septiembre. Mantenemos las dudas sobre el calendario de aplicación del listado positivo, que todo indica que se retrasará hasta la redacción del reglamento, y el curso de tenencia responsable, que se irá integrando progresivamente.
La nota negativa queda del lado de las familias y las protectoras saturadas de razas PPP, así como con el precedente que asienta esta ley entre un perro de caza y un perro de ciudad. Nos dice: no tienen los mismos derechos, pero la mitad de los españoles no están de acuerdo.